
El Programa de Sistemas Estratégicos de la Armada de los Estados Unidos (SSP) ha completado un hito significativo con el lanzamiento del primer sistema de misiles hipersónicos que se lanzará desde plataformas navales. La última prueba de vuelo desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida ha generado esperanzas de que este ambicioso proyecto tenga éxito. El aspecto más sorprendente de la prueba fue que el método de ignición de gas frío, preferido por la Armada y que permitirá el inicio seguro de la capacidad de ataque rápido convencional (CPS) desde plataformas navales, se probó a escala real por primera vez.
En la declaración oficial del Departamento de Defensa de Estados Unidos, el énfasis puesto por el comandante de la Armada estadounidense, John Phelan, respecto a este desarrollo histórico reveló claramente el papel crítico de las armas hipersónicas en la estrategia de disuasión integrada de Estados Unidos. Phelan expresó claramente la importancia estratégica del proyecto al afirmar: «La velocidad, el alcance y la alta capacidad de supervivencia que alcanzan las armas hipersónicas son un componente clave de la estrategia de disuasión integrada de Estados Unidos. Una vez operativo, el sistema CPS proporcionará a nuestras fuerzas armadas una capacidad que superará con creces nuestras capacidades actuales».
El método de ignición por gas frío adoptado por la Armada para el lanzamiento de misiles hipersónicos desde plataformas navales garantiza que el misil salga del barco de forma controlada y segura. Gracias a este método, es posible encender el motor principal del cohete (primera etapa) después de que el misil alcance una determinada altitud segura. Esta última prueba se realizó como parte de un programa conjunto de pruebas de vuelo del sistema de misiles hipersónicos realizado en estrecha colaboración entre la Marina y la Oficina de Capacidades Rápidas y Tecnologías Críticas (RCCTO) del Ejército. El proceso de validación operativa de este sistema conjunto, que pretende ser utilizado por ambas fuerzas, avanza gradualmente con dos pruebas de vuelo exitosas realizadas en 2024.
Fases y objetivos del Programa de Huelga Rápida Convencional
El Programa de Ataque Rápido Convencional (CPS) es una iniciativa estratégica liderada por la Armada de los EE. UU. que tiene como objetivo diseñar, desarrollar y probar sistemas de misiles hipersónicos de planeo y impulso que tienen el potencial de superar los sistemas de defensa enemigos y alcanzar alta velocidad y largo alcance. El objetivo final del programa es que estos misiles de gran capacidad sean utilizados eficazmente tanto por la Marina como por las Fuerzas Terrestres de Estados Unidos.
El Programa CPS implica un proceso de desarrollo complejo y por fases. Este proceso consta básicamente de tres etapas principales:
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Proceso de desarrollo de nivel medio de adquisición (MTA): Esta primera fase implica el desarrollo y pruebas exhaustivas de un prototipo de un sistema de misiles hipersónicos alimentados con gas frío. La finalización exitosa de la prueba de vuelo final puede considerarse un resultado importante de esta fase crítica de desarrollo. El objetivo es lograr la madurez tecnológica y de ingeniería fundamental de un sistema operativo.
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Implementación rápida de MTA: La segunda fase del programa se denomina Despliegue Rápido de MTA. El objetivo principal de esta fase es integrar el sistema CPS desarrollado en los destructores avanzados de clase Zumwalt de la Armada para obtener capacidad operativa temprana. Los avanzados sistemas de control de sensores y comandos de los destructores de la clase Zumwalt proporcionan una plataforma ideal para el uso efectivo de misiles hipersónicos.
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Programa de Adquisiciones de Defensa Importante: La fase final y más completa del Programa CPS prevé el despliegue del sistema a mayor escala bajo el paraguas del Programa de Adquisiciones de Defensa Mayor (MDAP). Durante esta fase, está previsto que los misiles CPS se integren principalmente en los submarinos de propulsión nuclear de clase Virginia de la Armada. El sigilo y la capacidad de supervivencia de los submarinos aumentarán significativamente el papel disuasorio estratégico de los misiles hipersónicos. Posteriormente, se completará la integración del sistema CPS a los destructores restantes de la clase Zumwalt, aumentando significativamente el poder de ataque general de la Armada.
Las exitosas pruebas de propulsión de gas frío por parte de la Armada de Estados Unidos para el lanzamiento de misiles hipersónicos desde plataformas navales se destacan como un avance que refuerza el liderazgo del país en tecnología de armas hipersónicas y afectará profundamente las futuras doctrinas de guerra naval. Este éxito no es sólo una victoria técnica, sino también un paso que tiene el potencial de aumentar significativamente las capacidades de disuasión estratégica de Estados Unidos y abrir una nueva página en el equilibrio de poder global. Una vez que se completen con éxito las fases planificadas del programa CPS, la Marina y el Ejército de los EE. UU. tendrán la capacidad de atacar objetivos convencionales con una velocidad, alcance y precisión sin precedentes, lo que proporcionará una ventaja decisiva en futuros escenarios de conflicto.