
El futuro del proyecto ferroviario de alta velocidad de California puede depender de las garantías financieras de los líderes estatales, según los comentarios realizados por el director ejecutivo de la autoridad, Ian Choudri. Choudri, nombrado en agosto, pretende revivir el ambicioso proyecto, que originalmente estaba previsto para cubrir la distancia entre San Francisco y Los Ángeles en menos de tres horas. Choudri subraya que una transformación exitosa del proyecto requiere una fuente estable de financiación y fuertes alianzas público-privadas.
La situación pasada y actual del proyecto son alarmantes
Los votantes de California aprobaron una emisión de bonos por 2008 mil millones de dólares en 10 para cubrir aproximadamente un tercio del presupuesto original del proyecto, y se esperaba que el proyecto estuviera terminado para 2020. Pero hoy, el costo estimado del proyecto ha ascendido a más de 100 mil millones de dólares, y aún no se ha tendido ni una sola vía. Esta situación plantea serios interrogantes sobre la sostenibilidad y el futuro del proyecto.
El apoyo financiero estable es el elemento vital del proyecto
El gobierno estatal ha realizado la mayor contribución financiera al proyecto hasta la fecha; Esto incluye los ingresos provenientes del programa de límite y comercio de emisiones. Sin embargo, la contribución del gobierno federal se mantuvo por debajo del 25% de la financiación total. Como los fondos de bonos existentes se están agotando, California debe desarrollar un plan de financiamiento sustentable para la parte del Valle Central del proyecto a mediados de 2026.
La autoridad ha gastado hasta la fecha alrededor de 13 millones de dólares. El director ejecutivo Choudri lanzó una dura advertencia: el corredor San Francisco-Los Ángeles podría tardar otros 20 años en completarse si no se consigue financiación adicional. Este potencial de largos retrasos corre el riesgo de reducir significativamente los beneficios económicos y sociales del proyecto.
La inversión privada es crucial para el futuro del proyecto
Choudri está negociando activamente con la administración del gobernador Gavin Newsom y los legisladores estatales sobre el futuro del proyecto. Sin la participación del sector privado, señala, el estado podría verse obligado a emitir nuevos bonos o buscar préstamos adicionales del gobierno federal. Sin embargo, estas opciones también tienen sus propias dificultades y limitaciones.
En un reciente foro industrial, los inversores privados expresaron interés en el proyecto, pero dejaron en claro que necesitaban garantías de reembolso respaldadas por el gobierno. Lou Thompson, presidente del panel de revisión de pares del estado, también dijo que la falta de financiación constante ha sido un obstáculo importante para el proyecto desde el principio.
La posibilidad de perder el apoyo del gobierno federal podría desencadenar una reevaluación completa del futuro del proyecto. La prioridad inmediata del director ejecutivo Choudri es restablecer la confianza y posicionar el proyecto ferroviario de alta velocidad de California como una solución de infraestructura viable, a largo plazo y sostenible para evitar más retrasos. Pero es probable que las garantías financieras de los líderes estatales desempeñen un papel decisivo para alcanzar este objetivo.